Desde aquí nos dirigimos hacia el cauce del río Braña, siguiendo las señales del sendero, e iniciando una ligera subida que nos llevó a Brañareonda y a la collada Beldoso.
Un poco más adelante alcanzamos la braña del Gumial y el precioso y mágico Bosque del Gumial, espectacular hayedo que tuvimos la oportunidad de disfrutar, a pesar de la molesta lluvia que nos acompañó en alguna parte del recorrido.
En Cuevas finalizamos esta bonita ruta.